COSAS DE GELY
El pasado 14 de Febrero, la administración de Donald Trump ha vuelto a generar controversia, esta vez con un mensaje de San Valentín que ha encendido el debate en redes sociales y todos los medios de comunicación.
La Casa Blanca publicó una tarjeta con un poema que decía: “Las rosas son rojas, las violetas azules, ven aquí ilegalmente y te deportaremos", acompañado de imágenes del presidente Trump y de su zar de la frontera, Tom Homan, sobre un fondo decorado con corazones. Este mensaje ha desatado una ola de indignación y ha sido calificado como cruel y deshumanizante.
La falta de sensibilidad mostrada por Trump publicando dicha tarjeta, demuestra la calaña del personaje, que sea del modo que sea, como despreciable narcisista su único afán es estar en boca de todos para bien o mal, porque a este tipo le da todo igual. ¿Qué se puede esperar de una “persona” que, en un día dedicado al amor y la compasión, utilice un mensaje tan repugnante y malvado? Numerosos críticos han señalado que este acto refleja una preocupante falta de empatía y comprensión hacia las difíciles situaciones que enfrentan los inmigrantes. Yo a este tipo, aunque no es rey, le daría un apelativo como se dieron a muchos reyes y reinas del pasado, Trump “El Inhumano” porque el de cruel ya está adjudicado a Pedro I “El Cruel”
Es fundamental recordar que las palabras tienen un poder inmenso, y usarlas para sembrar odio y división es un acto irresponsable, pero en este caso, calificar esa tarjeta como la obra de un demente a pesar de que pueda parecer extremo, en este caso considero que no lo es, es más pienso que es una reacción comprensible ante la evidente carencia de humanidad en el mensaje. En un mundo donde la amabilidad y la empatía son más necesarias que nunca, actos como este solo nos recuerdan cuánto nos queda por avanzar como sociedad. En que estarían pensando los que votaron a este “hombre”.