COSAS DE GELY
EL BUDA
Desde hace más de 2.500 años, el camino espiritual que hoy conocemos como budismo ha guiado muchas grandes civilizaciones, inspirando logros culturales refinados y generando una gran cantidad de profundas enseñanzas.
Algunas de las personas más sabias que jamás han caminado sobre el planeta han sido monjes y monjas budistas.
Hoy, un gran número de hombres y mujeres de diversas procedencias de todo el mundo siguen las enseñanzas de Buda.
Entonces, ¿Qué es el budismo? ¿Quién fue el Buda? Y ¿Cuáles sus enseñanzas?
El Buda
La persona que se iba a convertir en Buda, nació como Siddhartha Gotama hace unos 2.600 años. Fue príncipe de un pequeño reino cerca de lo que es ahora la frontera entre India y Nepal.
Aunque creció inmerso en el gran lujo de su estatus real y destacó en las artes y educación que le preparaban para el liderato, fuera de los confines del palacio Siddhartha se conmovió profundamente con el sufrimiento unido a la vida humana.
El vio que la vejez, la falta de salud o la muerte tocan inevitablemente a cada ser vivo. En una ocasión también vio a un monje viajero, una persona buscando una solución definitiva a los dolores de la vida y esto motivó a Siddhartha a empezar su búsqueda espiritual.
A la edad de 29 años dejó atrás el palacio y a su familia y se fue a los bosques y montañas remotas del noroeste de la India.
Viajando como un buscador religioso sin casa ni dinero, estaba determinado a averiguar si había una manera de experimentar paz y seguridad duradera que estuviera libre de las dificultades propias de la vida.
Superando el miedo y la dificultad de vivir en el bosque, adoptó la vida moral y pura de un monje. Estudió con los maestros de meditación y filósofos más sabios de su época, dominando lo que tenían para enseñar, pero, aun así, no pudieron proporcionar las respuestas que él estaba buscando. Entonces adoptó el camino del ascetismo extremo (no permitiéndose sentir placer y ayunando hasta el borde de la muerte) pero aun así sin resultados.
A la edad de 35 años, Siddhartha se dio cuenta de que ni la indulgencia, ni el auto tormento le llevarían a la auténtica felicidad. Entonces intentó una táctica diferente. Evitando esos dos extremos, aplicó a su mente al desarrollo de la concentración profunda y la libertad a través de la sabiduría.
Con la claridad y la agudeza extraordinariamente penetrante que se genera con la calma interior, enfocó su atención a investigar la naturaleza de la existencia, su causa y su final.
Sentado bajo las ramas de lo que hoy se conoce como el árbol del despertar, desarrolló su mente en estados de meditación tranquila y luminosa.
A través de la contemplación detallada de las características esenciales de la realidad, consiguió la liberación trascendente de la conciencia, conocida como iluminación (Nibbāna o Nirvana). Desde ese momento se le conoció como el Buda, aquel que ha despertado. La iluminación del Buda consistió en una comprensión total de la naturaleza del cuerpo, mente y fenómenos mentales. Este despertar no fue una revelación de un poder externo o deidad, sino un descubrimiento único que surgió desde el interior basado en los niveles más profundos de meditación.
La sabiduría había liberado su mente del origen de todo sufrimiento, es decir: el deseo egoísta, el odio y la percepción engañosa de la realidad. Esta experiencia eliminó cualquier rastro de insatisfacción y de descontento interno, revelando una paz inalterable.
Él había encontrado lo que buscaba, la solución final a los problemas de la vida, y el resultado fue una felicidad igualmente sublime y auténtica.
Esta iluminación es considerada el máximo potencial alcanzable, superando incluso cualquier estado divino.
Y habiéndolo experimentado por sí mismo, el Buda paso los 45 años siguientes enseñando un modo de vida, un camino práctico de entrenamiento y desarrollo, que cuando se sigue diligentemente, lleva a otros al mismo despertar.
Estas enseñanzas se conocen como Dhamma (o Dharma), que significa la naturaleza de las cosas y el camino a comprender las verdades de la existencia.
¿Qué te hace ser budista?
Para ser un budista, debes aceptar que todos los fenómenos compuestos son impermanentes, todas las emociones son dolor, todas las cosas carecen de una existencia inherente y que la iluminación está más allá de los conceptos. No es necesario tener presentes constantemente y sin cesar estas cuatro verdades, pero es aconsejable meditar sobre ellas.