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miércoles, agosto 03, 2022

LA LLAMADA AL LAMA DE LEJOS TEXTO RAIZ

COSAS DE GELY 

EL CANTO DEL LAMA (LAMA GYURME & JEAN - PHILIPPE RYKIEL) 
  
TEXTO RAÍZ DE LA LLAMADA  AL LAMA DE LEJOS

DE JAMGÖN KONGTRÜL LODRÖ THAYE

Este texto es la transposición de un comentario oral que Jamgön Kongtrül Rinpoche hizo sobre un texto escrito por Lodrö Thaye, la Llamada al lama de lejos, texto muy célebre, muy frecuentemente recitado en el linaje Kagyu. Cantado por lama Gyurme & Jean-Philippe Rykiel.

  

TEXTO RAÍZ CON VOZ DE LA LLAMADA  AL LAMA DE LEJOS

Lama, piensa en nosotros.

Bondadoso lama raíz, piensa en nosotros.

Esencia de los Budas de los tres tiempos.

Fuente del Dharma genuino, de las escrituras y de la realización.

Maestro de la noble asamblea, la Sangha.

¡Lama raíz, piensa en nosotros!

!Gran tesoro de bendiciones y de compasión!

Fuente de los dos siddhis.

Actividad Búdica que atiendes todos nuestros deseos.

¡Lama raíz, piensa en nosotros!

Lama Amitabha, piensa en nosotros.

Míranos desde la esfera libre de fabricación, el Dharmakaya.

Por la fuerza del karma negativo, erramos sin rumbo en el samsara.

Guíanos hasta el renacimiento en tu tierra pura de la gran felicidad.

Lama chenresi, piensa en nosotros.

Míranos desde la esfera del luminoso Sambhogakaya.

Pacifica completamente el sufrimiento de las seis clases de seres.

Y transforma totalmente los tres reinos del samsara.

Lama Padmasambhava, piensa en nosotros.

Míranos desde el luminoso loto de Nga Yab Ling, tu paraíso.

Apresúrate a proteger con tu compasión, en esta edad sombría.

A los discípulos tibetanos y a todos los que carecen de refugio.

Lama Yeshe Tsogyal, piensa en nosotros.

Míranos desde la ciudadela de la gran felicidad de las dakinis.

Condúcenos a los que hemos cometido actos dañinos.

A través del océano del samsara, hasta la gran ciudad de la liberación.

Lamas de la transmisión oral y del linaje terma, pensad en nosotros.

Miradnos desde la esfera de la sabiduría primordial, la unión de apariencia y vacuidad.

Atravesad la oscura prisión de nuestra confusa mente.

Y haced que amanezca el sol de la realización.

¡Omnisciente Drime Oser, piensa en nosotros!

Míranos desde la esfera de las cinco luces espontaneas.

Ayúdanos a perfeccionar la gran manifestación de la mente, primordialmente pura.

Y a completar las cuatro fases del Ati-yoga.

Incomparable señor Atisha e hijos de su corazón, pensad en nosotros.

Miradnos desde el centro del sagrado círculo de las cien divinidades, en Tushita.

Haced que nazca en nuestro flujo mental.

La Bodichita, la esencia de la vacuidad y la compasión.

¡Supremos siddhas, Marpa, Milarepa y Gampopa, pensad en nosotros!

Miradnos desde el espacio de la gran felicidad vajra.

Ayudadnos a alcanzar el supremo siddhi del Mahamudra inseparables dicha y vacuidad.

Despertad el Dharmakaya en el fondo de nuestro corazón.

Señor del mundo, Karmapa, piensa en nosotros.

Míranos desde el espacio en que incontables seres, ilimitados como el cielo son instruidos.

Haz que comprendamos que todos los fenómenos son mera ilusión, desprovistos de verdadera existencia.

Y realicemos que la mente y las apariencias surgen como los tres kayas.

¡Lamas de los cuatro grandes y ocho menores linces kagyus, pensad en nosotros!

Miradnos desde el reino de las apariencias puras que surgen de modo natural.

Disipad la confusión de las cuatro situaciones.

Y conducidnos a la perfección de la experiencia y la realización.

¡Cinco antepasados Jetsuns, pensad en nosotros!

Miradnos desde la esfera del nirvana y samsara indiferenciados.

Ayudadnos a unificar completamente la visión pura, la meditación y la acción;

Guiadnos a lo largo de la senda suprema, del Vajrayana secreto.

¡Lamas del incomparable Sangpa Kagyu, pensad en nosotros!

Miradnos desde el reino totalmente puro de los Budas.

Adiestradnos correctamente en los medios hábiles que conducen a la liberación.

Y guiadnos hasta descubrir el camino de no más aprendizaje, la unión última.

¡Mahasiddha Thangtong Gyalpo, piensa en nosotros!

Míranos desde la esfera de la compasión sin esfuerzo.

Haznos capaces del logro de la disciplina que permite la realización de la no existencia última, y amaestrar el prana y la mente.

¡Padre único, Dampa Sangye, piensa en nosotros!

Míranos desde el espacio del cumplimiento de la actividad suprema.

infunde en nuestros corazones la bendición del linaje.

Y haz surgir en todas las direcciones signos auspiciosos.

¡Madre única, Machik Lapkyi Drönma, piensa en nosotros!

Míranos desde el espacio de la Prajnaparamita.

Haznos capaces de desarraigar la fijación al ego, la fuente del orgullo.

y de ver la verdad de la ausencia del yo, más allá de toda concepción.

¡Omnisciente Dólpo Sangye, piensa en nosotros!

Míranos desde el espacio dotado con todos los aspectos supremos.

Ayúdanos a reunir, en el canal central, el prana de la transferencia.

Y a obtener el inmutable cuerpo vajra.

¡Jetsün Taranatha, piensa en nosotros!

Míranos desde el espacio de los tres mudras.

Ayúdanos a viajar, sin obstáculos, por la secreta senda vajra.

Y condúcenos al logro del cuerpo de arco iris, el gozo de la totalidad del espacio.

¡Jamyang Khyentse Wangpo, piensa en nosotros!

Míranos desde el espacio de la sabiduría primordial que conoce todos los fenómenos en su simplicidad y vastedad.

Ayúdanos a remover los velos de nuestra ignorancia.

Y a incrementar la luminosidad de nuestra suprema inteligencia.

¡Osel Drülpe Dorje, piensa en nosotros!

Míranos desde la esfera de las cinco luces del arco iris.

Ayúdanos a eliminar las impurezas de bindu, prana y mente.

Y condúcenos al despertar del cuerpo del vaso juvenil.

¡Pema Do Ngak Lingpa, piensa en nosotros!

Míranos desde la esfera de inmutable dicha y vacuidad inseparables.

Haznos capaces de realizar completamente.

¡Ngakwang y Yönten Gyamtso, piensa en nosotros!

Míranos desde la esfera del espacio y sabiduría primordial en unión.

Haz que cesemos de tomar las apariencias como si fueran reales.

Y desarrollemos la habilidad de transformar en camino todo lo que suceda.

¡Bodhisattva Lodro Thaye, piensa en nosotros!

Míranos desde tu estado de bondad amorosa y compasión.

Haznos capaces de reconocer a todos los seres como a nuestros padres amorosos.

Y de desarrollar nuestra habilidad para beneficiar a otros desde el fondo del corazón.

¡Pema Kargyi Wangchu, piensa en nosotros!

Míranos desde la esfera de la gran felicidad y la luminosidad.

Libera los cinco venenos en las cinco sabidurías;

Haz que nuestro apego dualista a pérdidas y ganancias desaparezca.

Tenyi Yungtrung Lingpa, piensa en nosotros,

Míranos desde el espacio en que samsara y nirvana son lo mismo.

Haz que brote en nuestra mente una devoción genuina.

Y condúcenos a la realización y liberación simultaneas.

¡Bondadoso lama raíz, piensa en nosotros!

Míranos desde el lugar de la gran felicidad en la cima de nuestra cabeza.

Condúcenos a encontrar el auténtico rostro del Dharmakaya, la consciencia de nuestra verdadera naturaleza.

Y a que, en esta misma vida, alcancemos el completo despertar.

¡Ay! los seres sensibles que como nosotros mismos, han cometido incontables acciones negativas.

Vagan sin rumbo por el samsara desde tiempo sin principio.

A pesar de padecer todavía sufrimientos sin fin, no sentimos ni siquiera un instante de arrepentimiento.

Lama, piensa en nosotros, apresúrate a mirarnos con compasión.

Bendícenos para que la renuncia surja de lo más profundo de nuestro corazón.

Pese a haber obtenido un precioso nacimiento humano, libre y bien provisto, lo desperdiciamos en vano.

Siendo distraídos constantemente por las actividades de una vida sin sentido.

Cuando tratamos de realizar la gran meta de la liberación, nos domina la pereza.

Y volvemos con las manos vacías de un país lleno de joyas.

Lama, piensa en nosotros, apresúrate a mirarnos con compasión.

Bendícenos para que demos pleno sentido a esta vida.

No hay uno solo en la tierra que no tenga que morir.

Muchos seres parten ahora mismo, unos tras otros, hacia el más allá.

También nosotros hemos de morir pronto.

Pero como idiotas, contamos con vivir largo tiempo.

¡Lama, piensa en nosotros, apresúrate a mirarnos con compasión!

Bendícenos para que abandonemos todas nuestras expectativas.

Nos veremos separados de nuestros amigos más cercanos.

Otros gozarán los bienes que acumulamos con avidez.

Incluso el cuerpo que tanto queremos será dejado atrás.

Y nuestra conciencia vagará sin dirección en los bardos del samsara.

¡Lama, piensa en nosotros, apresúrate a mirarnos con compasión!

Bendícenos para nos demos cuenta de la futilidad de esta vida.

La negra oscuridad del temor, frente a nosotros, amenaza con engullimos;

Y los fieros y rojos vientos del Karma nos empujan por detrás.

Los hediondos mensajeros del señor de la muerte nos golpean y ensartan.

Y así tenemos que experimentar los insoportables sufrimientos de los reinos inferiores.

¡Lama, piensa en nosotros, apresúrate a mirarnos con compasión!

Bendícenos para que seamos liberados de los abismos de los reinos inferiores.

Escondemos en nuestro interior una montaña de faltas;

Y sin embargo juzgamos a los demás y hablamos de sus defectos, aunque sean diminutos como semillas de sésamo.

Carecemos de la menor cualidad positiva, pero nos jactamos diciendo cuan grandes somos.

Nos autoproclamamos practicantes del Dharma, pero solo practicamos lo contrario al Dharma.

¡Lama, piensa en nosotros, apresúrate a mirarnos con compasión!

Bendícenos para que abandonemos nuestro orgullo y egocentrismo.

Escondemos en nuestro interior el demonio de la fijación egocéntrica que nos depara constantes desgracias.

Todos nuestros pensamientos acrecientan las kleshas.

Todas nuestras acciones tienen resultados no virtuosos.

No hemos ni siquiera dirigido nuestros pasos hacia la liberación.

¡Lama, piensa en nosotros, apresúrate a mirarnos con compasión!

Bendícenos para que erradiquemos completamente el aferramiento al yo.

Una pequeña alabanza nos hace felices; un pequeño reproche nos entristece.

Unas pocas palabra rudas bastan para que se desmorone la armadura de nuestra paciencia.

Aún viendo a los desamparados, no surge en nosotros la compasión.

Cuando se presenta la oportunidad de ser generosos, nos atan los nudos de la avaricia.

¡Lama, piensa en nosotros, apresúrate a mirarnos con compasión!

Bendícenos para que nuestra mente sea una con el Dharma.

Pensamos que el samsara es valioso, cuando en realidad no lo es.

Abandonamos nuestras metas más elevadas por comida y vestidos.

Pese a poseer cuanto necesitamos, siempre queremos más.

Nuestra mente es engañada por los fenómenos irreales e ilusorios.

¡Lama, piensa en nosotros, apresúrate a mirarnos con compasión!

Bendícenos para que abandonemos el apego a esta vida.

Somos incapaces de soportar el más leve dolor físico o mental,

Pero con ciega testarudez, no vacilamos en caer en los reinos inferiores.

Pese a ver directamente la infalibilidad de la ley de causa y efecto.

No actuamos virtuosamente, sino que incrementamos nuestras acciones negativas.

¡Lama, piensa en nosotros, apresúrate a mirarnos con compasión!

Bendícenos para que alcancemos la completa convicción en las leyes del karma.

Odiamos a nuestros enemigos y nos apegamos a los amigos.

Perdidos en las tinieblas de la ignorancia, no sabemos que aceptar o que rechazar.

Cuando practicamos el Dharma, caemos bajo la influencia de la agitación, el torpor y la somnolencia.

Cuando no practicamos el Dharma, somos astutos y nuestra mente y sentidos están alerta.

¡Lama, piensa en nosotros, apresúrate a mirarnos con compasión!

Bendícenos para que exterminemos a nuestro enemigo, las kleshas.

Nuestra apariencia exterior es la de un auténtico practicante del Dharma.

Pero en nuestro fuero interno, la mente no se ha fundido con el Dharma.

Escondemos las klesas, como a serpientes venenosas, en nuestro interior.

En situaciones adversas, los ocultos defectos de un mal practicante salen a la luz.

¡Lama, piensa en nosotros, apresúrate a mirarnos con compasión!

Bendícenos para que seamos capaces de adiestrar nuestra mente.

Sin reconocer nuestros propios defectos.

Adoptamos la forma externa de un practicante del Dharma, ocupándonos mientras tanto de actividades contrarias al Dharma.

Nos hemos habituado a las kleshas y a las actividades no virtuosas.

Una y otra vez surgen intenciones virtuosas; una y otra vez son erradicadas.

¡Lama, piensa en nosotros, apresúrate a mirarnos con compasión!

Bendícenos para que veamos nuestros propios defectos.

Con el paso de cada día, nos acercamos más y más a la muerte.

Con la llegada de cada nuevo día, nuestra mente se vuelve más y más rígida.

Aunque servimos a nuestro lama, nuestra devoción se desvanece gradualmente.

Nuestro amor, afecto y visión pura hacia nuestros amigos del Dharma disminuyen.

¡Lama piensa en nosotros, apresúrate a mirarnos con compasión!

Bendícenos para que logremos adiestrar nuestra mente obstinada.

Aunque hemos tomado refugio, generado la Bodichita y suplicado.

La devoción y la compasión no han nacido en el fondo de nuestro corazón.

La actividad dhármica y la práctica de la virtud se han vuelto palabras huecas.

Nuestros fútiles logros son muchos, pero ninguno ha conmovido nuestro corazón.

¡Lama, piensa en nosotros, apresúrate a mirarnos con compasión!

Bendícenos para que todo lo que hagamos esté en armonía con el Dharma.

Todo el sufrimiento se origina al desear la felicidad sólo para nosotros mismos.

A pesar de que ha sido enseñado que el despertar se alcanza sólo beneficiando a otros.

Generamos la Bodichita, mientras secretamente cultivamos nuestros propios deseos.

No beneficiamos a los demás y, más aun, incluso les dañamos inconscientemente.

¡Lama, piensa en nosotros, apresúrate a mirarnos con compasión!

Bendícenos para que seamos capaces de cambiarnos a nosotros mismos por los demás.

Nuestro lama es de hecho la manifestación del mismo Buda, pero lo tomamos por un hombre ordinario.

Olvidamos la bondad del lama al darnos las profundas instrucciones.

Si no nos da lo que queremos, nos enojamos.

Vemos la conducta y actividad del lama a través del velo de nuestras dudas y puntos de vista erróneos.

¡Lama, piensa en nosotros, apresúrate a mirarnos con compasión!

Bendícenos para que, libres de oscurecimientos, aumente nuestra devoción.

Nuestra propia mente es Buda, pero no lo reconocemos.

Todos los conceptos son el Dharmakaya, pero no lo realizamos.

Este es el estado de simplicidad natural, pero no logramos mantenerlo.

Esta es la verdadera naturaleza de la mente, reposando en sí misma, pero somos incapaces de creerlo.

¡Lama, piensa en nosotros, apresúrate a mirarnos con compasión!

Bendícenos para que la autoconsciencia se libere en su fundamento.

Es bien cierto que la muerte  vendrá, pero somos incapaces de asumirlo de corazón.

Es cierto que el Dharma genuino nos beneficiará, pero somos incapaces de practicarlo correctamente.

La ley del karma, de causa y efecto, es ciertamente verdadera, pero erramos al decidir qué abandonar y qué aceptar.

La atención plena y la vigilancia son ciertamente necesarias, pero estas cualidades no son estables en nosotros, y somos arrastrados por la distracción.

¡Lama, piensa en nosotros, apresúrate a mirarnos con compasión.

Bendícenos para que mantengamos una atención plena sin distracciones.

Debido a nuestro karma negativo, hemos nacido al final de esta era degenerada.

Todo cuanto hicimos previamente, se ha tornado en causa de sufrimiento.

Las malas compañías arrojan sobre nosotros la sombra de sus acciones negativas.

Nuestra práctica de la virtud se corrompe por charlas sin sentido.

¡Lama, piensa en nosotros, apresúrate a mirarnos con compasión!

Bendícenos para que de todo corazón perseveremos en la práctica del Dharma.

Al principio, en nuestras mentes solo hay el Dharma.

Pero el resultado es al final el samsara y los reinos inferiores.

La cosecha de la liberación es destruida por el granizo de la actividad no virtuosa.

Como salvajes estúpidos y violentos, hemos perdido de vista nuestro fin último.

¡Lama, piensa en nosotros, apresúrate a mirarnos con compasión!

Bendícenos para que llevemos el Dharma genuino hasta la perfección.

Bendícenos para que siga en nosotros un sincero arrepentimiento.

Bendícenos para que dejemos ir nuestras vanas expectativas.

Bendícenos para que, en lo más hondo de nuestro corazón, recordemos la ineludible muerte.

Bendícenos para que alcancemos la certeza en la ley del karma.

Bendícenos para que nuestro camino esté libre de obstáculos

Bendícenos para que seamos capaces de perseverar en la práctica.

Bendícenos para que transformemos las circunstancias difíciles en camino.

Bendícenos para que los antídotos sean, por su propio poder, completamente eficaces.

Bendícenos para que surja en nosotros una devoción genuina.

Bendícenos para que contemplemos el verdadero rostro de la naturaleza de la mente.

Bendícenos para que la autoconsciencia se despierte en el centro de nuestro corazón.

Bendícenos para que se disuelvan completamente las engañosas apariencias.

Bendícenos para que alcancemos el despertar en una sola vida.

¡Precioso lama, te suplicamos!

¡Amable lama, señor del Dharma, te llamamos con anhelo!

¡Para nosotros, seres indignos, tú eres la única esperanza!

Bendícenos para que tu mente se funda con la nuestra.

 

Fuente: https://www.academia.edu/38097144/Canto_al_Lama_por_Jamg%C3%B6n_Kongtr%C3%BCl_Rinpoche