COSAS DE GELY
No hay futuro, el cambio climático nos devorará a todos.
No hace falta ser una lumbrera, para darse cuenta de ello, simplemente, siendo un poco observadores y viendo como los países que circundan el mediterráneo, se abrasan literalmente, sobra cualquier explicación.
Nuestro planeta está en un grave peligro. La Tierra está dejando de ser esa diosa amorosa de brazos abiertos que nos proporcionaba los alimentos necesarios para nuestra supervivencia, así como el aire puro y limpio que, hace décadas respiráabamos, y aquellas aguas impolutas y cristalinas de sus ríos con las que antaño saciábamos nuestra sed. Hemos convertido los mares de nuestra casa universal la Tierra, en una cloaca llena de plásticos, y nuestro espacio exterior en una chatarrería de cientos de miles de satélites que lo circundan. Por las venas de nuestro planeta, ya no circula la maravillosa sabia de los árboles, no, ahora por las nuevas venas de nuestro planeta, que son caminos, carreteras y autopistas circulan millones de coches, que lanzan miles de toneladas de dióxido de carbono a la atmósfera, esa es la sabia que hoy recorren los conductos venosos de nuestro precioso planeta, y esa es la sabia que hoy, está envenenandolo todo, y a todos
Esto tiene muy mala pinta, y pienso que las medidas tomadas para evitar las emisiones de dióxido de carbono han sido tomadas tarde y mal.
La lucha decisiva de nuestro tiempo presente y futuro será la tensión entre la madre naturaleza y la naturaleza humana. Por lo tanto, muchos de nosotros deberíamos pensar ya, con qué estamos lidiando. Lo que está ocurriendo es real, y a todos nos va la vida en ello. ¿A alguien le han pasado desapercibidos los múltiples sucesos climáticos que se están dando estas últimas semanas, en el continente europeo? Alemania, Bélgica, Grecia, España y Turquía, están siendo asoladas por las lluvias torrenciales y abrasadas por el fuego. Últimamente, los acontecimientos catastróficos y mortales cada vez son más habituales, hay indicios de que incluso las personas que dudaban en aceptar la realidad del cambio climático, se están dando cuenta, de la gran amenaza.
Veranos de casi 6 meses, e inviernos de 30 días: será el futuro que le espera a España si no se frena el cambio climático.
No soporto ver en lo que se ha convertido nuestro planeta. La Tierra se ha transformado en un antro, manipulado por una minoría formada por gremios de corruptos insaciables, para los que, su único dios es el dinero, y su objetivo prioritario, acumularlo en grandes cantidades, aunque, no tengan suficientes vidas para gastarlo.
Ampliar su fortuna, es el exclusivo fin que persigue, una minoría de señorones que, por el vil metal esclavizan, a la mayor parte de la humanidad. Aumentar su capital, es lo más importante en la vida de estos truhanes, aunque a causa de ello, la Tierra y, todos los que vivimos en ella, nos vayamos a hacer puñetas. Sus negocios y sus industrias, son sus maquinitas de hacer dinero, maquinitas que son incapaces de parar, aunque el planeta reviente.
Los expertos alertan de que el cambio climático "es irreversible", y señalan a los humanos como únicos responsables de los fenómenos extremos.
Sin retorno en el cambio climático
"Esto posiblemente, solo se podría detener, haciendo un paro global en todo el planeta, y cuando digo en todo, es en todo". Pero mucho me temo que, dado el nivel de globalización que hemos alcanzado, no sea viable llevarlo a cabo, sobre todo, en lo que respecta al abastecimiento de alimentos, pues la superpoblación que actualmente tiene el planeta, y la dependencia que hemos creado entre unos países y otros, quizás lo haría inviable.
Globalización es igual a ignorancia.
Les pido disculpas por mi manera de expresarme, pero es que el cambio climático me tiene verdaderamente aterrorizada.
Gely Sastre